Manuel Amador Miñón
Manuel Amador Miñón (1922-2007) hijo de Antonia Miñón Maera y Ramón Amador Navarro, nació en Arahal en la calle Sevilla donde vivió toda su niñez y prácticamente parte de su vida por su negocio.
La historia que contamos de Manuel es el ejemplo de los tantos ciudadanos españoles que tuvieron que emigrar a otros países en los años sesenta para poder ofrecerle a su familia algo que llevarse a la boca. Padre de familia de 5 hijos (3 varones y 2 mujeres) casado con Rosario Martínez Sánchez, se trasladó a Alemania donde estuvo trabajando tres años en la industria del ferrocarril.
Desde joven siempre fue una persona muy activa y trabajadora, sus primeros comienzos tuvieron lugar en el campo cuando diariamente se trasladaba con su carro de mulos a la localidad vecina de Morón de la Frontera para traer piedras para posteriormente utilizarla en construcciones de viviendas.
A su llegada de vuelta a España con los ahorros conseguidos del duro trabajo compró una casa en la esquina que une la calle Juan Pérez con Sevilla donde montó un bar llamado "La Costilla", nombre que hacía referencia a la especialidad de la casa que eran sus zorzales y pajaritos fritos.
Detrás de la barra aparte de su labor de camarero era un gran aficionado al mundo del cante jondo donde entre cervezas, manzanillas y tapas de pajaritos fritos tarareaba canciones flamencas de grandes artistas de la época.
Unas de sus canciones favoritas siempre fue principalmente una de la artista "la Parrala" donde continuamente la cantaba junto a sus clientes y diferentes reuniones entre amigos. Debida a la demanda que siempre le hacían amigos y clientes respecto a la canción de la Parrala comenzaron todo el mundo a llamarle con el sobrenombre "El Parralo", nombre con el que fue conocido durante toda su vida.