Iglesia del Santo Cristo
La actual Iglesia comienza a edificarse en 1745 al obtener los permisos necesarios por parte del Arzobispado, siendo bendecida el 31 Mayo de 1761, bajo la financiación y patrocinio de Juan Leonardo Malo Manrique, construida sobre la primitiva capilla del Hospital de la Misericordia, presidida por la imagen del Santo Cristo de la Misericordia, atribuida a Pedro Millán en 1501, representando la figura del Redentor atado a una columna alta, siguiendo un antiguo modelo iconográfico que fue paulatinamente olvidado tras el Concilio de Trento, remontándose la fundación de esta Hermandad al 27 de Junio de 1501, siendo aprobados los estatutos el 4 de Noviembre de 1534. Esta magnífica escultura fue quemada en los sucesos de 1936, quedando solo la mano derecha y el capitel de la columna, acordando en Octubre de 1936, que la mano se conservara como reliquia en una urna de cristal y que se venerase en el altar mayor.
De la ermita, que estaba ubicada en el centro del lugar, se conserva hoy sólo su portada mudéjar de ladrillo, fechable en los años finales del siglo XV. El interior en sus orígenes era de una sola nave, con una superficie de veintiocho varas de largo y cerca de seis varas de ancho. Los muros de la ermita eran de ladrillo y mampostería, abriéndose en ellos pocos vanos, de tamaño reducido y estando reforzados por gruesos estribos y contrafuertes, como puede observarse en la pared lindante con la calle Consolación. De estos escasos vanos sólo se habla de cuatro puertas que se corresponden con la entrada, situada a los pies de la nave por la que se accedía a la misma a través de un cancel de madera; una segunda, situada a mano izquierda de la anterior según se entraba a la ermita; una tercera, a mitad de la nave, en su parte izquierda que se comunicaba con el hospital; y la última, de la sacristía, situada en la cabecera.
Todos los pueblos tienen sus leyendas y Arahal no podía ser una excepción, según se cuenta en algunos escritos la antigua imagen del Santo Cristo de la Misericordia era llevada en una carreta tirada de bueyes desde Sevilla a otro pueblo. Al pasar por Arahal la carreta quedó clavada en el suelo y fue imposible mover sus ruedas a tal punto que pensaron que era un milagro lo que había ocurrido. La imagen fue bajada de la carreta y con gran devoción la llevaron a esa pequeña ermita situada junto al actual templo donde desde entonces recibió gran veneración.
Hay una fecha de especial significado para el futuro de esta bella obra barroca, la del 29 de Abril de 1743, fecha en la que D. Juan Felipe Téntor, natural de Arahal y abogado de los Reales Consejos y Relator del Supremo de los Cruzados, informa a la Hermandad del compromiso de un señor, D. Juan Leonardo Malo Manrique de construir una capilla para el Cristo de la Misericordia, tal como se refleja en el Acta de Cabildos del 7 de Mayo de 1743, siendo nombrado bajo la dirección de la obra, el maestro alarife de albañilería D. Pedro Manuel Godoy, vecino de la localidad de Osuna, realizándose en tres fases dicho proyecto.
La torre, terminada en templete, es un bellísimo modelo de labor de ladrillo cortado: en ella se utilizan pilastras salomónicas y el arco trilobulado, junto con estípites y pintajes de ricos perfiles. Inmediatamente a ella se alza su airosa torre, cuyo cuerpo de campanas y remate, presentan una decoración de tales caracteres, que no dudamos en presentarla como modelo de construcciones análogas en el referido siglo. En el campanario se puede encontrar en la campana la siguiente leyenda: “SSMO. XRTO DE LA MYSERICORDYA ORA PRO NOBIS” El nombre del artista que la fundió “FRANCISCO FERNASH” y el lugar y la fecha en que se realizó esta fundición “EN SEVILLA, AÑO DE 1792”. No se han conservado las tres campanas originales que fueron bendecidas el 20 de Mayo de 1771, salvo la mencionada. Tras una obra de restauración de la torre, fue colocada una nueva campana en la parte oriental del campanario, que lleva la siguiente inscripción: NTRA. SRA. DE LOS DOLORES. AÑO 1999. ORA PRO NOBIS. Fundición Hijo de Manuel Rojas. Torredonjimeno. Jaén.
La actual Iglesia del Santo Cristo, tras la finalización de su edificación, posee una fachada exterior de ladrillo, formada por dos cuerpos: el primero está compuesto por un arco de medio punto entre pilastras cajeadas con decoración de tipo vegetal que da paso a un frontón curvo y roto sobre que aparece el segundo cuerpo, cuya estructura repite el esquema anterior. Data del siglo XVIII y está situada a los pies de la iglesia enmarcándose en contrafuertes con columnas adosadas. La iglesia está constituida por una sola nave de cuatro tramos, crucero y capillas laterales. En la nave central se observa una bóveda de medio cañón con arcos fajones y lunetos y el crucero con una bóveda semiesférica. La planta es de cruz latina la cual se apoya sobre pilares que sostienen arcos de medio punto. El coro está ubicado en los pies de la nave. La sacristía, que se sitúa tras la cabecera, presenta una bóveda de medio cañón.
En el retablo mayor, de 1760 aproximadamente, construido en madera policromada con tres calles, camarín y ático, encontramos esculturas de San Antonio de Padua y San Cristóbal y un relieve del Padre Eterno siendo de madera estofada. El camarín fue restaurado por Aníbal González en 1919, presenta una escultura del Cristo de la Misericordia, ejecutado por Castillo Lastruci en el año 1936. Además el camarín está decorado con pinturas murales del tercer cuarto del siglo XVIII. Existen dos cuadros uno de Crucificado y otro de la Inmaculada en los laterales exteriores. En los arcos del prebisterio, pinturas murales de la Oración en el Huerto y Cristo con la Cruz del siglo XVIII.
En el muro de la izquierda del crucero hallamos un retablo del tercer cuarto del siglo XVIII donde figura una escultura del Crucificado de la Buena Muerte y en la nave hay un retablo de tipo neoclásico que data del 1896 y donde se puede apreciar una moderna imagen del Sagrado Corazón. Le sigue un retablo barroco con imagen moderna de San Francisco de Asís, un lienzo de San Benito del siglo XVIII y entre ambos se encuentra situada la imagen de la Virgen que presidía el altar mayor de la antigua ermita de Madre de Dios del Campo, que data del Siglo XVII, siendo traslada desde la ermita al Convento de Nuestra Señora del Rosario, donde en Junio de 2014, las Madres Dominicas donaron la imagen a la Iglesia del Santo Cristo, siendo restaurada y renombrándola con el nombre de Madre de Dios del Carmen.
En el muro derecho del Evangelio se sitúa un retablo de madera dorada con un cuerpo y una calle, del tercer cuarto del siglo XVIII con la imagen de la Virgen de los Dolores, escultura realizada por el imaginero sevillano Antonio Castillo Lastrucci en el año 1943. En la capilla que le sigue figura una imagen de vestir de la Virgen del Carmen. En los laterales, imágenes de San Joaquín y Santa Inés. Le continúa un retablo-hornacina con escultura de la Divina Pastora de finales del siglo XVIII y un lienzo de San Bernardo del mismo tiempo. También podemos encontrar en el templo, en el crucero el púlpito, un lienzo de la Virgen de Guadalupe de la primera mitad del siglo XVIII y otro de Cristo camino del Calvario de 1700 aproximadamente, aparte de numerosos objetos de orfebrería como ostensorios en plata dorada, cálices, copones, etc. El templo lo completa el coro, órgano de tubería, posiblemente del siglo XVIII.
Tenemos que tener en cuenta que en este templo se hayan recogidas características generales del estilo arquitectónico en el que se encuadra, es decir, el Barroco; en él queda patente el horror vacui, es decir, el horror al vacío, por medio del cual se tiende a ocupar todo el espacio (con molduras, retablos, capillas, etc.). Además otra reminiscencia del Barroco en este templo es la presencia de pequeños espejos, que dejan bien patente la continuidad del espacio que se pretendía con este estilo.