Dolores Zayas Arias de Reina

Dolores Zayas Arias de Reina (1887-1955), perteneció a unas de las familias más nobles de la localidad de Arahal, siendo sus padres Manuel Zayas Montilla y Francisca Arias de Reina. Dolores contrajo matrimonio con José Zayas Caro (1874-1938), donde no tuvieron herederos y adoptó una hija llamada Carmen Moreno de la Cova que falleció en el año 1995. Los restos mortales del matrimonio descansan en la Iglesia del Santo Cristo, dada a su vinculación desde siempre hacia la Hermandad de la Misericordia donde aportaron durante su vida un gran patrimonio para la recuperación del Templo tras la posguerra.

José Zayas Caro fue un personaje importante en la Hermandad de la Misericordia, ya que desde el año 1917 ocupó cargos de relevante significación, siendo en varias ocasiones Hermano Mayor, precisamente en los momentos más difíciles por los que atravesó la Hermandad, como fueron los comprendidos entre los años 1932 y 1940.

Fue un gran bienhechor de la Hermandad, colaborando económicamente en multitud de iniciativas como la construcción del púlpito, arreglo del camarín, etc. Su esposa, Dolores Zayas fue camarera del Cristo desde 1917 hasta su muerte, en el año 1955. También fue una gran bienhechora con esta Hermandad, legando gran cantidad de enseres, como la custodia, la cruz de guía, los faroles y creó una fundación para el Hospital, para la cual legó varias fanegas de olivares.

En el interior de la puerta del coro de la iglesia aparece la siguiente inscripción: “Este Sagrario fue costeado y donado para la Iglesia del Santo Cristo de la Misericordia por Doña Dolores Zayas Arias de Reina, en memoria de su difunto esposo, Don José Zayas Caro. 8 de Agosto de 1942". Además donaron diferentes enseres de gran valor patrimonial como fueron un Copón de plata pequeño de 1940, el libro de reglas de la Hermandad en 1945 realizado en la joyería Dalmas de Sevilla o una casulla morada de damasco con un corazón estampado en el centro y capa pluvial negra de moaré con galón de seda de 1940.

Aparte de la devoción al Santísimo Cristo de la Misericordia, tuvo su devoción hacia la imagen de la Virgen del Carmen, imagen que se venera en el altar mayor de la Parroquia de Nuestra Señora de la Victoria, siendo partícipe en la sufragación de los gastos que conllevaba para su salida procesional que realizaba cada 16 de Julio.

La familia residió en la calle Corredera 28, en una casa edificada sobre el año 1930 por Antonio Salvador Romero "el Marchenero", siendo unas de las casas de mayor extensión e importancia patrimonial de dicha calle, contando con puerta trasera a la calle Maestro Godino. El edificio está compuesto por yuxtaposición de amplias crujías paralelas a la fachada de muros de carga de gran espesor, forjados de madera y cubierta inclinada de tejas a dos aguas, tras el pretil de fachada.

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